Tras el pitazo final del encuentro sostenido este lunes en Japón en la gran final del mundial de clubes donde Barcelona le dio un baile al Dantos de Neymar, se empezarón a soltarmuchas especulaciones en cuanto al fichaje del delantero revelación del Santos: Neymar y de su posible acercameinto al Barza.
Nada más acabar la final del Mundial de Clubes, Neymar se acercó hasta Pep Guardiola para felicitarle por la consecución de un nuevo título y para casi suplicarle que le deje participar en el proyecto que lidera desde hace tres temporadas. «Lléveme al Barça», espetó. Pero, como indica As, el cortejo del atacante canarinho al FC Barcelona ya había comenzado mucho antes.
En el descanso intercambió su camiseta con la de Carles Puyol y cuando el árbtiro pitó el final del encuentro corrió al encuentro de Leo Messi para pedirle la suya. Por si fuera poco, el ariete del Santos no dudó en abrazarse a Sandro Rosell y en deshacerse en elogios hacia el fútbol que práctica el conjunto barcelonista. «El Barça nos ha enseñado a jugar al fútbol, cuatro goles son muchos, pero lo que tenemos que hacer es aprender.
El Barça es una máquina, para nosotros era un gran desafío, pero, a veces, para ganar, antes hay que perder. Hoy he visto a los dos mejores jugadores del mundo: Xavi y Messi», aseguró. Tampoco se quedó corto su compañero de equipo Ganso. El centrocampista, al que también se ha llegado a relacionar con el Barça, aprovechó las preguntas de los medios para indicar: «No aspiro a fichar por el Barça, a lo máximo que aspiro es a que un día me dejen jugar un partido con ellos». ¿Acabarán vistiendo de azulgrana?
Nada más acabar la final del Mundial de Clubes, Neymar se acercó hasta Pep Guardiola para felicitarle por la consecución de un nuevo título y para casi suplicarle que le deje participar en el proyecto que lidera desde hace tres temporadas. «Lléveme al Barça», espetó. Pero, como indica As, el cortejo del atacante canarinho al FC Barcelona ya había comenzado mucho antes.
En el descanso intercambió su camiseta con la de Carles Puyol y cuando el árbtiro pitó el final del encuentro corrió al encuentro de Leo Messi para pedirle la suya. Por si fuera poco, el ariete del Santos no dudó en abrazarse a Sandro Rosell y en deshacerse en elogios hacia el fútbol que práctica el conjunto barcelonista. «El Barça nos ha enseñado a jugar al fútbol, cuatro goles son muchos, pero lo que tenemos que hacer es aprender.El Barça es una máquina, para nosotros era un gran desafío, pero, a veces, para ganar, antes hay que perder. Hoy he visto a los dos mejores jugadores del mundo: Xavi y Messi», aseguró. Tampoco se quedó corto su compañero de equipo Ganso. El centrocampista, al que también se ha llegado a relacionar con el Barça, aprovechó las preguntas de los medios para indicar: «No aspiro a fichar por el Barça, a lo máximo que aspiro es a que un día me dejen jugar un partido con ellos». ¿Acabarán vistiendo de azulgrana?
Un primer tiempo realmente aburrido, mas aya de los goles del Barca Santos no hizo absolutamente nada, a comparación de un segundo tiempo muy dinmacio de esos que invitan al televidente a ver el encunetro y disfrutar realmente del buen futbol.
El delantero argentino ha perdido protagonismo y eso le ha molestado. Sabe que son muchos los clubs europeos que están dispuestos a ficharle y a tratarle económicamente como un crack, algo que no acaba de suceder en el Bernabéu. A Florentino Pérez, presidente madridista, le costó mucho mejorarle la ficha, pese a que con sus goles Higuaín se había hecho merecedor de un contrato a la altura de los mejores.
"Habíamos planteado el partido jugando con tres defensas y con Alves, que nos da muchas opciones. En la Supercopa nos dimos cuenta de que nos crearon muchos problemas y no queríamos que sus defensas fueran a buscar a Leo. Mi experiencia como entrenador me dice que hay que ser muy valiente. En la vida hay que elegir entre ser valiente y muy valiente". El entrenador español concluyó elogiando el partido de Alexis, el primer goleador: "Ha estado impecable. Buscaba que fijara a los centrales. Se mueve muy bien al espacio y buscábamos esa superioridad".
"Un primer tiempo súper equilibrado y un segundo donde un gol que es pura suerte, ni talento ni fallo, decide. Tuvimos el empate a dos, parecía que el balón estaba dentro, pero no y después ellos han tenido supremacía psicológica. Al estar ganado pudieron tocar el balón como tanto les gusta. Hacen el 3-1 y tenemos el 3-2 en un remate de Kaká que no es mérito del portero. Es pura suerte. Sin querer quitar mérito, la suerte ha marcado la diferencia".